EL ARTE DE IRPIS: 

PEDRA MORTA, PEDRA VIVA – MENORCA

Josep Lluís Juaneda Salas, más conocido como Irpis, se inició en el arte con 63 años. Actualmente jubilado, después de una vida dedicada al sector del comercio y actividades diversas, el artista despierta un talento innato para la escultura. Fue en diciembre de 2013,se decide por esculpir su propia obra con una serie de figuras llenas de imaginación, una buena forma seguir la línea artística de su compañero.

El material que Irpis emplea para sus esculturas no son piedras compradas ni cortadas a medida, sino que son piedras que encuentra en el campo, generalmente de piedra arenisca o piedra viva menorquina y que en un momento dado le llaman la atención. Es entonces cuando se pone en marcha su imaginación y cuando en realidad empieza -o continua- el proceso de creación artística, encuentra la piedra que le da la inspiración y acto seguido experimenta. “Para mi el arte significa que el material que estoy trabajando transmeta alguna cosa” dice IRPIS si le preguntan la motivación de sus formas. Sus dibujos son una especie de esbozos primarios o ideas para futuras creaciones aunque, también pueden quedar simplemente en dibujos. Irpis experimenta, transforma lo imaginado en una pieza escultórica única y que, surrealista y subjetiva, invita a soñar. Para dar forma a sus esculturas utiliza serruchos, escarpes o limas, entre otros. Algunas veces emplea tintes de pigmentos naturales que él mismo elabora utilizando cobre, hierro, yema y diferentes tipos de hierbas. La temática que el artista sigue en sus obras gira en torno a la figura humana pero también esculpe formas animales y figuras decorativas. Toda la obra se engloba dentro del mensaje fundamental de mostrar la importancia del patrimonio cultural de Menorca en todo el Mundo y lo demuestra ejerciendo como colaborador al Grupo de Intervención de Bienes Etnológicos (Gibet). En un documental titulado "pedra viva, pedra morta" que se visionará en contínuo durante la exposición, se podrá sentir los vínculos entre el arte y el artista, de un lado, y la naturaleza y la piedra del otro. 

On ne fait pas de la peinture, 

On "entre" en peinture... 

Je suis née un 9 octobre à Saint Mandé dans les Hauts de Seine. Dès mon plus jeune âge, je voyage avec mes parents (mon père officier et pilote de l'armée de l'air française) dans des pays africains et ce jusqu'à l'âge de 24 ans

(Ethiopie, Mauritanie, Maroc, Sénégal, Yémen), puis avec mon mari (Cameroun).

Attirée d'abord par la photo, je bascule vite dans la peinture.

En 1976, je reviens en France et durant 2 années je travaille seule sur le graphisme avec l'impressionniste Eugène PECH    dans sa maison de Carcassonne (Aude).

En 1980,  je  crée à Yaoundé au Cameroun, l'UDAPCAM  (l'union des artistes plasticiens camerounais).

De 1982 à 1984, je fus l'une des rares élèves du peintre André Lemaitre ami de VLAMINCK . Nous avons travaillé ensemble dans son atelier à Cesny-aux-Vignes (Calvados) et dans la campagne normande environnante.

Je lui dois beaucoup, c'était un grand peintre et un grand érudit.

J'ai travaillé également en étroite collaboration avec Jean-Pierre LEFEVRE de Saint Lô.

En 1983, j'entre aux "Artistes Français" dont je suis devenue sociétaire depuis 1986.

A partir de 1985, je m'installe à Albi et me lie d'amitié avec les peintres toulousains: 

Maurice MELAT, André LARTIGUE  et Pierre DARQUES.